Denunciandos públicamente a las empresas que estan obligando a sus empleados a protestar a favor del dictador Roberto Micheletti, son cientos las denuncias de Hondureños que se quejan por el abuso de sus empleados, ya que empresas como Clover Brand estan chatajeando a sus empleados, pidiendoles que asistan a estas falsas manifestaciones y en caso de no ir, el despido.
Esto es un vulgar chantaje, una burla a la dignidad de las personas y a los derechos adquiridos por los obreros a lo largo de la historia.
Denunciamos al dictador Roberto Micheletti por financiar con dinero de estado el transporte de personas para manifestarse a favor de el, asi mismo lo decimos con toda seguridad, todas esos manifestantes son pagados directamente al subir a los buses, asi lo han dicho cinicamente muchas personas que han sido participes de esta burla a la comunidad mundial.
Denunciamos a las intituciones del estado por amenzar a sus empleados con despedirles si no asisten a las marchas a favor de micheletti y al mismo tiempo por la persecución en contra de funcionarios del gobierno legitimo de Manuel Zelaya, y las destituciones ilegales hechas por este dictador.
Denunciamos a los militares por ametrallar los buses que se dirigen a las principales ciudades de Honduras a demostrar su apoyo al presidente constitucional Manuel Zelaya, Pueblo humilde y trabajador que tiene que costear con los gastos del transporte y la alimentación si se puede.
Denunciamos a este gobierno facista y retrograda, por censurar los medios de comunicación alternativos, por intentar boicotear nuestros espacios y mediante la intimidación tratar de callar las voces del pueblo.
Denunciamos al Dictador Roberto Micheletti por reactivar escuadrones de la muerte y tener personajes involcurados en crimenes de lesa humanidad, como el asesino Billy Joya que hoy forma parte de su dictadura como ministro asesor
Denunciamos a Diario el Heraldo y Diario la Prensa por utilizar a supuestos fotografos y reporteros para infiltrarse en las manifestaciones fotografiar a dirigentes y manifestantes del pueblo y proporcionar esa información a comandos y escuadrones de tortura y asesinato pertenecientes a los militares y la policia nacional.